Francisco Provenzano Viñuales- El modelo de bilingüismo cordial de Feijóo como solución al Apartheid lingüístico en Cataluña– 21 de junio de 2022
La llegada de Alberto Núñez Feijóo a la presidencia del Partido Popular, inaugura una nueva etapa en el principal partido de la oposición. Esta situación puede representar una gran oportunidad para solucionar la triste situación en la que se encuentra envuelta la educación catalana pre universitaria y la segregación lingüística que sufren miles de alumnos que no quieren ser privados del derecho a estudiar en su propio idioma.
El de Os Peares, tiene una amplia experiencia en la gestión de la política lingüística, tras haber gobernado la Xunta de Galicia durante trece años y haber desarrollado en el año 2012 junto a otros dirigentes, la ponencia lingüística del Congreso Nacional del PP, en donde la formación apoyó el bilingüismo en la Comunidades Autónomas que cuentan con lenguas cooficiales. El término bilingüismo cordial fue acuñado por el propio líder gallego en el año 2007 cuando era el líder de la oposición en el parlamento regional, y denunciaba la ley de promoción y uso del gallego, aprobada por el bipartito PSdeG-BNG, como una herramienta para llevar a cabo una inmersión lingüística encubierta. Luego con su llegada al poder, basó la política lingüística de su gobierno en buscar una relación cordial entre la enseñanza de ambos idiomas, estableciendo el dictado del 50% de las clases en gallego y el otro 50 % en castellano, añadiendo el inglés como tercer idioma. Y estableciendo que en la educación infantil las clases sean dictadas en la lengua predominante entre los alumnos .Con la aprobación del decreto del pluralismo en la enseñanza, la Xunta intentó ir más allá al permitir la elección de la lengua , pero sufrió un revés judicial ya que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia consideró ilegal el artículo que permitía a los alumnos elegir el idioma.
La situación actual de la educación preuniversitaria en Cataluña es muy distinta a la realidad gallega, con un gobierno autonómico en situación de rebeldía que se niega a respetar la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia de Cataluña que establece que un 25 % de las clases deben dictarse en castellano. La decisión de la Generalitat, es un paso más en su afán de erradicar el castellano de las aulas catalanas, imponer la inmersión lingüística y segregar a miles de estudiantes, profesores y padres que ven cómo sus derechos fundamentales son vulnerados y sufren día día la imposibilidad de enseñar o aprender su propia lengua en su propio país.
En el corto plazo esta situación puede ser resuelta mediante la presentación de un recurso de inconstitucionalidad contra el decreto-ley aprobado por la Generalitat, para no tener que acatar la sentencia. El gobierno de Pedro Sanchez ha demostrado no tener ningún tipo de intención de presentar este recurso, y desde el PP señalan que es el gobierno nacional el que debe hacer cumplir la ley en todos los territorios y garantizar el acceso a la enseñanza del castellano a todos los ciudadanos. Desde Vox y Ciudadanos proponen la aplicación del famoso artículo 155 de la Constitución para intervenir la Generalitat y hacer respetar la decisión judicial. Pero tanto el recurso como la aplicación del artículo 155 son soluciones temporales, lo que hay que lograr es alcanzar el consenso de los sectores de la sociedad catalana que se oponen a la inmersión lingüística y hacer un frente común para enfrentar políticamente a los defensores de la segregación lingüística. Y el modelo lingüístico aplicado por Feijoo en Galicia puede ser el modelo alternativo al modelo actual, que como dijo en su momento Pablo Casado y reiteró el actual líder de los populares impone un Apartheid lingüístico en Cataluña.
Si bien es verdad que lo ideal sería que cada familia pueda elegir la lengua en la que son educados sus hijos, dada la situación actual en la que se encuentra inmerso el sistema educativo catalán, entiendo que el modelo de bilingüismo cordial sería la solución más realista al problema, porque no solamente garantiza la enseñanza del castellano, sino que también afirma la igualdad entre ambas lenguas y es mucho más ambicioso que el mínimo impuesto por la justicia.
Es imprescindible para el futuro de España alcanzar una solución, para que los niños catalanes aprendan el idioma del país donde viven. Porque el actual sistema educativo no solo segrega en materia lingüística, sino que también profundiza la desigualdad económica y divide a los estudiantes, entre los estudiantes cuya enseñanza se dicta en castellano porque sus padres pueden pagar un centro privado, y a los que se les niega este derecho por no poder pagar una educación privada. Pero para que esto suceda, la defensa de la enseñanza del castellano en Cataluña no se puede limitar solamente a la labor de las organizaciones civiles y a los padres de los alumnos, si no que tiene que haber un firme compromiso por parte de los partidos políticos que se oponen a la segregación lingüística de trabajar y luchar para lograr otro tipo de modelo educativo. Para lograr este objetivo es necesario que los partidos defensores de la constitución mejoren sus resultados electorales , y por ende su representación en el parlamento autonómico.
Como he escrito anteriormente, la llegada de un líder como Feijóo, que entiende los problemas y las realidades de la periferia española, y ha desarrollado un discurso más moderado, puede contribuir al resurgimiento del Partido Popular en Cataluña e iniciar un camino para atraer tanto a los históricos defensores del castellano como a nacionalistas catalanes desencantados que entienden que la Generalitat ha pasado los límites respetables con respecto a la segregación lingüística. Poner un límite al proyecto lingüístico de la Generalitat, también es necesario para que la segregación no se siga extendiendo a otras comunidades como la Comunidad Valenciana o las Islas Baleares donde con la excusa de promover el valenciano y el balear se intenta reducir la presencia del castellano en la enseñanza.
Cualquier ciudadano que se considere defensor de la igualdad y la libertad se encuentra en el deber de trabajar para lograr que miles de alumnos catalanes tengan el derecho de poder estudiar en su propia lengua. Porque el plurilingüismo tiene que ser una herramienta para enriquecer el acervo cultural de la nación española, y no debe ser utilizado como herramienta para dividir y fragmentar a la sociedad.
Los españoles debemos estar orgullosos de la diversidad de lenguas que coexisten en nuestro territorio, pero también entender que hay que garantizar la enseñanza del castellano en todo el territorio y Cataluña no puede ser la excepción. No nos podemos permitir dejar el idioma en el que escribieron Cervantes, Miguel de Unamuno, Quevedo, García Lorca y Machado; que brinda una identidad común a los países de Iberoamérica, y el cuarto idioma del mundo en cuanto a hablantes con 543 millones, fuera de las aulas catalanas.
Y qué mejor ejemplo para demostrar la importancia y la belleza de la coexistencia entre el castellano y el catalán, que el gran cantautor, poeta y compositor Joan Manuel Serrat, demostrando que es compatible y enriquecedor cantar y componer en ambas lenguas, además de defender el uso de ambas.
«El pluralismo lingüístico tiene que ser una herramienta para enriquecer el acervo cultural de la nación española y no debe ser utilizado para dividir y fragmentar a la sociedad»
Francisco Provenzano Viñuales- El modelo de bilingüismo cordial de Feijóo como solución al Apartheid lingüístico en Cataluña– 21 de junio de 2022
La llegada de Alberto Núñez Feijóo a la presidencia del Partido Popular, inaugura una nueva etapa en el principal partido de la oposición. Esta situación puede representar una gran oportunidad para solucionar la triste situación en la que se encuentra envuelta la educación catalana pre universitaria y la segregación lingüística que sufren miles de alumnos que no quieren ser privados del derecho a estudiar en su propio idioma.
El de Os Peares, tiene una amplia experiencia en la gestión de la política lingüística, tras haber gobernado la Xunta de Galicia durante trece años y haber desarrollado en el año 2012 junto a otros dirigentes, la ponencia lingüística del Congreso Nacional del PP, en donde la formación apoyó el bilingüismo en la Comunidades Autónomas que cuentan con lenguas cooficiales. El término bilingüismo cordial fue acuñado por el propio líder gallego en el año 2007 cuando era el líder de la oposición en el parlamento regional, y denunciaba la ley de promoción y uso del gallego, aprobada por el bipartito PSdeG-BNG, como una herramienta para llevar a cabo una inmersión lingüística encubierta. Luego con su llegada al poder, basó la política lingüística de su gobierno en buscar una relación cordial entre la enseñanza de ambos idiomas, estableciendo el dictado del 50% de las clases en gallego y el otro 50 % en castellano, añadiendo el inglés como tercer idioma. Y estableciendo que en la educación infantil las clases sean dictadas en la lengua predominante entre los alumnos .Con la aprobación del decreto del pluralismo en la enseñanza, la Xunta intentó ir más allá al permitir la elección de la lengua , pero sufrió un revés judicial ya que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia consideró ilegal el artículo que permitía a los alumnos elegir el idioma.
La situación actual de la educación preuniversitaria en Cataluña es muy distinta a la realidad gallega, con un gobierno autonómico en situación de rebeldía que se niega a respetar la sentencia del Tribunal Supremo de Justicia de Cataluña que establece que un 25 % de las clases deben dictarse en castellano. La decisión de la Generalitat, es un paso más en su afán de erradicar el castellano de las aulas catalanas, imponer la inmersión lingüística y segregar a miles de estudiantes, profesores y padres que ven cómo sus derechos fundamentales son vulnerados y sufren día día la imposibilidad de enseñar o aprender su propia lengua en su propio país.
En el corto plazo esta situación puede ser resuelta mediante la presentación de un recurso de inconstitucionalidad contra el decreto-ley aprobado por la Generalitat, para no tener que acatar la sentencia. El gobierno de Pedro Sanchez ha demostrado no tener ningún tipo de intención de presentar este recurso, y desde el PP señalan que es el gobierno nacional el que debe hacer cumplir la ley en todos los territorios y garantizar el acceso a la enseñanza del castellano a todos los ciudadanos. Desde Vox y Ciudadanos proponen la aplicación del famoso artículo 155 de la Constitución para intervenir la Generalitat y hacer respetar la decisión judicial. Pero tanto el recurso como la aplicación del artículo 155 son soluciones temporales, lo que hay que lograr es alcanzar el consenso de los sectores de la sociedad catalana que se oponen a la inmersión lingüística y hacer un frente común para enfrentar políticamente a los defensores de la segregación lingüística. Y el modelo lingüístico aplicado por Feijoo en Galicia puede ser el modelo alternativo al modelo actual, que como dijo en su momento Pablo Casado y reiteró el actual líder de los populares impone un Apartheid lingüístico en Cataluña.
Si bien es verdad que lo ideal sería que cada familia pueda elegir la lengua en la que son educados sus hijos, dada la situación actual en la que se encuentra inmerso el sistema educativo catalán, entiendo que el modelo de bilingüismo cordial sería la solución más realista al problema, porque no solamente garantiza la enseñanza del castellano, sino que también afirma la igualdad entre ambas lenguas y es mucho más ambicioso que el mínimo impuesto por la justicia.
Es imprescindible para el futuro de España alcanzar una solución, para que los niños catalanes aprendan el idioma del país donde viven. Porque el actual sistema educativo no solo segrega en materia lingüística, sino que también profundiza la desigualdad económica y divide a los estudiantes, entre los estudiantes cuya enseñanza se dicta en castellano porque sus padres pueden pagar un centro privado, y a los que se les niega este derecho por no poder pagar una educación privada. Pero para que esto suceda, la defensa de la enseñanza del castellano en Cataluña no se puede limitar solamente a la labor de las organizaciones civiles y a los padres de los alumnos, si no que tiene que haber un firme compromiso por parte de los partidos políticos que se oponen a la segregación lingüística de trabajar y luchar para lograr otro tipo de modelo educativo. Para lograr este objetivo es necesario que los partidos defensores de la constitución mejoren sus resultados electorales , y por ende su representación en el parlamento autonómico.
Como he escrito anteriormente, la llegada de un líder como Feijóo, que entiende los problemas y las realidades de la periferia española, y ha desarrollado un discurso más moderado, puede contribuir al resurgimiento del Partido Popular en Cataluña e iniciar un camino para atraer tanto a los históricos defensores del castellano como a nacionalistas catalanes desencantados que entienden que la Generalitat ha pasado los límites respetables con respecto a la segregación lingüística. Poner un límite al proyecto lingüístico de la Generalitat, también es necesario para que la segregación no se siga extendiendo a otras comunidades como la Comunidad Valenciana o las Islas Baleares donde con la excusa de promover el valenciano y el balear se intenta reducir la presencia del castellano en la enseñanza.
Cualquier ciudadano que se considere defensor de la igualdad y la libertad se encuentra en el deber de trabajar para lograr que miles de alumnos catalanes tengan el derecho de poder estudiar en su propia lengua. Porque el plurilingüismo tiene que ser una herramienta para enriquecer el acervo cultural de la nación española, y no debe ser utilizado como herramienta para dividir y fragmentar a la sociedad.
Los españoles debemos estar orgullosos de la diversidad de lenguas que coexisten en nuestro territorio, pero también entender que hay que garantizar la enseñanza del castellano en todo el territorio y Cataluña no puede ser la excepción. No nos podemos permitir dejar el idioma en el que escribieron Cervantes, Miguel de Unamuno, Quevedo, García Lorca y Machado; que brinda una identidad común a los países de Iberoamérica, y el cuarto idioma del mundo en cuanto a hablantes con 543 millones, fuera de las aulas catalanas.
Y qué mejor ejemplo para demostrar la importancia y la belleza de la coexistencia entre el castellano y el catalán, que el gran cantautor, poeta y compositor Joan Manuel Serrat, demostrando que es compatible y enriquecedor cantar y componer en ambas lenguas, además de defender el uso de ambas.